En el Nombre de Dios, el Misericordioso, el Compasivo |
Para los buscadores espirituales, almas inquietas que quieren un camino espiritual, pero que encuentran frente a sí tantas religiones, cómo saber cuál es la indicada.
Caligrafía de texto coránico |
EL BUSCADOR, LA ESPIRITUALIDAD Y LAS GRANDES RELIGIONES
1) PRESENTIMIENTO: Puedes tener el corazón "contento" o en todo caso tenerlo muy distraído con el mundo (sea en felicidad o en sufrimiento), y no buscas más allá de éste.
O puedes sentir que hay algo más hondo, más valioso, más sutil.
2) ESPIRITU: Si eres de los últimos, puedes dejarte percibir eso Otro de vez en cuando, como un espectador eventual, esporádico. O puedes interesarte en serio, buscar más de Eso. Querer vivir de modo consustancial con Eso, que intuyes que da sentido nuevo a todo lo demás que ya conoces.
3) BUSCADOR: Si eres de los últimos, podrías querer descubrir cómo adentrarte a vivir a la luz de Eso por ti mismo, descubriendo todo por ti mismo, suponiendo que no hay peligros o rutas falsas o zonas oscuras, o zonas que te regresan a lo mismo, y pensando así que podrías caminar si quieres hacerlo todo por ti mismo de cero. Es decir, pensando que todo sólo podría salirte de maravillas (a pesar de que sería como querer viajar a una tierra lejana desde tu ligar sin mapa ni conocimiento más que de tu propio lugar, sin saber siquiera la distancia o los riesgos en el camino).
O .... podrías pensar que quizá en la historia amplia de la humanidad, de tantos siglos y tantos y tantos millones de seres, ya ha habido otros que han iniciado ese recorrido antes que tú, y quizás hayan avanzado en conocimientos de la mano de otros antes que ellos, de modo que en vez de querer descubrir la pólvora de nuevo (sin conocimientos de química siquiera), podrías querer investigar si hay caminos de conocimiento para adentrarse en serio en Eso.
4) SENDEROS DE MAESTROS: Si eres de los últimos, podrías darte cuenta pronto que ha habido grandes genios de la espiritualidad en la historia de la humanidad, y varios caminos.
Y entonces:
4.1.- Podrías ser de quienes dicen: todos esos caminos son todos iguales en tanto que todos tienen parte de verdad, o de plano puedes decir más bien que todos son en el fondo íntegramente verdaderos (a pesar de las evidencias claras de que enseñan cosas muy distintas e incompatibles). Y si eres de quienes piensan así entonces, al fin y al cabo, aunque no tengas conciencia de ello, te das la curiosa categoría de un aprendiz que se coloca a juzgar el grado de conocimientos de los más variados maestros. Es decir, aprendiz que juzga a los caminos y los maestros como maestro de maestros.
Eso es en el fondo: o hacer tu propio camino, con un poco de todos (sincretismo), a diferencia de todos esos maestros, que no actuaron así.
O podrías terminar diciendo: elijo un camino, pero cualquiera es verdadero y podría haber elegido cualquier otro (perennialismo).
En cualquier caso, en rigor, si eres sincero, verías que ningún maestro ni camino actúa así. Así que te quedas sin camino real y sin maestro real, contrario a tu finalidad inicial.
4.2.- O si tu sed de lo Otro te ha llevado a conocer que hay maestros y caminos, y no actúas con la ingenuidad u orgullo escondido del sincretista o del perennialista, entonces podrías ser un buscador que se plantee cuál es el mejor camino disponible, el más auténtico, y te hagas la pregunta de cómo orientarte para una posible elección dentro de los múltiples senderos.
5. MAESTROS FALSOS, MAESTROS MÁS AUTÉNTICOS
Si eres de los últimos, entonces podrías investigar y cuidar más de tu intuición interna (t, de seguro, en este punto, buscar auxilio de Eso para que te oriente en tu caminar), y advertirías que si bien hoy se habla de muchos maestros y senderos, hay básicamente dos grandes tipos: los que surgen de caminos New Age (de la llamada Nueva Era), todos históricamente muy muy nuevos. Y los que está en caminos de siglos de tradición espiritual.
Algunos quedan admirados de maestros de luces de neón, luces artificiales, modernas.
Otro investigan y perciben (no es difícil notarlo en realidad) que esos maestros de la Nueva Era, en todos sus tipos, te ofrecen otra vez ... más mundo y mundo, sea para adquirir fama espiritual, a través de poderes ocultos, o para tener bienestar asegurado, o para tener un distintivo social que te marque como de una supuesta "élite" de así llamados iniciados, etc.
Y podrías percibir que más confiables, menos mundanos, menos bulliciosos, más cálidos, son los maestros que vienen desde caminos que parten desde la antigüedad.
6. RELIGIONES
Si eres de los últimos, verás que hay caminos del pasado y caminos que siguen aún hoy existiendo. Como te has puesto la meta de encontrar un camino practicable con maestros accesibles, de poco te servirá los logros que se narren de un camino de la antigüedad que no tenga prolongación real hoy en día.
Y entonces te preguntarás: ¿qué gran camino espiritual, que viene de la antigüedad, con historia de genios espirituales en su historia, existe hoy?
Y te darás cuenta que eso es lo que se llaman las Grandes Religiones.
Y querrás investigar de ellas, familiarizarte con ellas lo suficiente como para el objetivo de tu caminar con el horizonte de la Eternidad rodeándote.
Y aquí, puedes advertir que, miradas desde la distancia, con perspectiva, en realidad son muy pocas:
- Islam, Cristianismo, Judaísmo, por un lado, más entrelazadas entre sí,
- Y más al Oriente: Hinduismo, Budismo, Taoísmo (el confucianismo es más una moral filosófica que una gran religión).
7. CARACTERÍSTICAS DE UNA GRAN RELIGIÓN
Llegado a este punto, podrías advertir que la razón y la intuición parten de que hay un Uno, un Otro, un Principio, del que depende todo, superior a todo, no material, no aprisionado ni en el tiempo ni en el espacio, Eterno, los Perfecto sin mancha alguna. Llamémoslo por ello mismo Dios.
Y aunque puedas notar, en tus conocimientos, que las grandes religiones tienen varios elementos en común, unas más que otras entre sí, tendrás que constatar que el Principio de todo debe ser por su naturaleza misma el principio y fin de tu búsqueda y tu camino.
Y entonces puedes advertir que:
- El budismo no tiene a Dios como centro, ni inicio ni fin. Y aunque haya muchas cosas que admirar en ese camino, y muchos maestros de renombre, podrías pensar que hay una carencia, una falta de base, en su estructura misma, que no pone a este camino como el más directo o el más afinado si este camino no conoce a Dios.
- El hinduismo, aunque tiene muchas formas, tiene a su vez muchos dioses, cientos de ellos, entre ellos varios dioses mayores, y varias escuelas del hinduismo no concuerdan cuál es el dios mayor de los mayores. Incluso la versión más "intelectual" del hinduismo llamado monista, que dice que en el fondo hay solo 1 gran Dios, acepta rezar y hacer culto externo a múltiples dioses, como todas las demás tendencias del hinduismo. Al notar esto, podrías pensar entonces que, incluso cuando haya muchos caminos de renombre allí, debe haber una carencia o un defecto de fondo que atraviesa toda la estructura de la vivencia hindú. Y es que el politeísmo (a nivel práctico, de culto, incluso teológico, hasta en el caso de su pretendido monismo del advaita vedanta) es la negación, el olvido o la supresión de la realidad única que le debe corresponder por su naturaleza únicamente a Dios, el Único.
- El taoísmo, aunque tiene diferencias con el hinduismo y el budismo, en realidad comparte con el hinduismo el politeísmo.
Si adviertes lo anterior, podrías decir entonces que por mucho que haya cosas que admirar en esas religiones del Lejano Oriente, la gran religión debe ser aquella que vive por y para Dios Único, del modo más espiritual y a la vez razonable y practicable. Y voltearías tu mirada a las llamadas Religiones del Libro o Religiones Monoteístas o las Grandes Religiones del Cercano Oriente, por orden de aparición: el Judaísmo, el Cristianismo y el Islam.
8. EL ENCUENTRO CON DIOS
Llegados a este punto, hay muchas cosas admirables sin duda en estas tres Grandes Religiones Monoteístas. Pero es indudable también que no es posible que las tres sean ciertas a la vez, ya que hay hay algunas enseñanzas fundamentales en cada una de ellas que son incompatibles con las otras dos.
Y si investigas, si, en este punto, además de tu investigación, acompañas tu caminar decidido con la oración a Dios buscando ayuda, podrías percibir, si Dios lo quiere, que:
- Texto sagrado: en relación a sus textos sagrados, en el caso del Judaísmo y del Cristianismo, hay un hecho de gran trascendencia en relación a la Torá y el Evangelio que existen en las biblias (y que muchos de sus seguidores no conocen, a pesar de que es algo ampliamente conocido entre los especialistas en la historia de la aparición del texto bíblico):
- Moisés, la paz sea con él, según la Biblia, falleció en lo que se denominaría hoy día el siglo XIII antes de Jesús, la paz sea con él. Trece siglos antes de Jesús, es decir: hace ¡34 siglos atrás!.
Y sin embargo, el ejemplar completo de la Torá más antiguo que se ha conservado es de apenas ocho siglos de antigüedad (escrito entre los años 1155 y 1225 después de Jesús). Y si se toma en cuenta los fragmentos más antiguos (no la Tora completa, sólo fragmentos), los más antiguos que se conservan llegan hasta el siglo III antes de Jesús.
Es decir, incluso los fragmentos más antiguos tienen MIL AÑOS de distancia de la vida de Moisés, la paz sea con él.
No hay escritos por esos mil años, ni hay cadena ininterrumpida, conocida y fiable de transmisores orales, si acaso, de esos diez siglos (40 generaciones de transmisores faltantes y/o desconocidos, cuando menos).
Eso quiere decir que nada garantiza que la Torá que se conoce hoy, incluso la que podía haber en el siglo III antes de Jesús, fuera efectivamente la Torá que se dice que recibió por revelación Moisés, la paz sea con él.
Eso explicaría además algunos hechos, pocos pero ciertos y chocantes, que se han introducido en las escrituras judías (como al supuesta orden de Dios a Moisés, claramente falsa sin duda, de ordenar un genocidio a perpetuidad de un pueblo, el cananita - Números 31-).
En el caso del Cristianismo, nunca se ha tenido el Evangelio de Jesús según Jesús. Sólo se tiene el evangelio de Mateo, Marcos, Lucas y Juan. Pero el autor del evangelio de Juan no es tampoco Juan el apóstol, sino un griego. Y los historiadores del texto de la Biblia están todos de acuerdo en que el evangelio de Juan es el más tardío en aparecer.
El problema del texto del Nuevo Testamento, por otro lado, es que hay fragmentos y manuscritos antiguos, pero hay diferencias entre ellos y es de sobra conocido entre los especialistas del texto bíblico el problema de fiabilidad del texto que esto presenta. Tomamos el siguiente extracto de una obra de un autor que a su vez compendia el parecer de expertos en este campo:
"Bart D. Ehrman: “Posiblemente es más fácil poner el asunto en términos comparativos: hay más diferencias en nuestros manuscritos que palabras en el Nuevo Testamento” [Cita tomada de su libro: The New Testament: A Historical Introduction to the Early Christian Writings [El Nuevo Testamento: Una introducción histórica a los primeros escritos cristianos]. p. 12..]
¿Cómo ocurrió esto? Registros pobres. Deshonestidad. Incompetencia. Prejuicios doctrinales. Elija lo que quiera.
Ninguno de los manuscritos originales ha sobrevivido desde el período de los primeros cristianos. Como resultado, “jamás estaremos en capacidad de declarar algún conocimiento sobre lo que el texto de ningún escrito bíblico fue con exactitud” [Cita tomada del libro: Funk, Robert W.; Hoover, Roy W. y el Seminario de Jesús. The Five Gospels: The Search for the Authentic Words of Jesus (Los Cinco Evangelios: La búsqueda de las palabras auténticas de Jesús). p. 6] "
(Fragmento de texto Tomado de: Dr. Laurence B. Brown. "¿Desviados? Explicación Sobre la Guía y la Desviación en las Religiones Abrahámicas", p. 255. Disponible para descargarse gratuitamente de: https://d1.islamhouse.com/.../ih.../single/es_misgoded.pdf).
A diferencia de la Torá y la Biblia en general, la Revelación del Sagrado Corán ha sido extraordinariamente preservada, desde hace 14 siglos atrás, desde la recitación del Corán que salió de la lengua bendita del Profeta del Islam, el amado de Dios, nuestro maestro Muhammad, la bendición y la paz de Dios sean sobre él.
Sir. William Muir, especialista del orientalismo y particularmente de la historia de los principios del Islam, autor de números libros sobre el Islam, escribió sobre el Corán: "Probablemente no existe en el mundo otro libro que haya conservado la pureza del texto durante 14 siglos".
Y el profesor Nicholson, dice en su libro, Historia literaria de los árabes:
"Aquí en el Corán tenemos materiales de autoridad única e incontestable para rastrear el origen y el desarrollo temprano del Islam, materiales que no existen en el caso del budismo o el cristianismo o cualquier otra religión antigua".
Es fácil comprobar la preservación del Sagrado Corán, lo que singulariza al Islam dentro de las Religiones Monoteístas con un privilegio esencial (Puede verse al respecto: https://www.newmuslims.com/.../la-preservacia-n-del.../)
- Figura Principal: En cuanto a las figuras centrales de cada una de estas grandes religiones, como hemos dicho, hay más del diez siglos de distancia entre los primeros escasos fragmentos antiguos de la Torá y la vida de Moisés, la paz sea con él. Y el Nuevo Testamento no ofrece un testimonio seguro sobre la vida y las palabras de Jesús, la paz sea con él, y aun así sólo narra unas pocas páginas de su vida -sobre todo de 3 años de su vida- si se juntan los relatos de los cuatro evangelios.
En el caso del Profeta Muhammad (la bendición y la paz de Dios sean sobre él y sobre todos los Enviados de Dios) se ha preservado el conocimiento detallado de su vida, de sus 63 años de vida, incluyendo 23 años como Profeta (desde sus 40 años en adelante). Tenemos de él información que, en comparación con las otras dos religiones monoteístas, es claramente bastante más amplia y mucho mejor transmitida
¿Qué cristiano no querría saber con detalle la vida diaria de Jesús, la paz sea con él?.
Nosotros conocemos el ejemplo extraordinario y abundante de la vida del último de los Enviados Divinos, además del texto del Libro Sagrado que le fue revelado.
Dos bendiciones extraordinarias que singularizan al Islam.
Hay otro aspecto adicional que alguien puede constar en las tres grandes religiones de que hablamos:
Los judíos no reconocen la luminosidad espiritual que tuvo Jesús, la paz sea con él, el Auxilio Divino que tuvo. Y los cristianos, a su turno, no reconocen el brillo espiritual extraordinario que vino con el último de los Enviados Divinos: Muhammad, la bendición y paz sean con él.
El Islam es más abarcante: reconocemos las luces y el auxilio divino, la misión extraordinaria y los milagros que vinieron con los Profetas de Israel y con Jesús, la paz sea con ellos, y a su vez reconocemos que el Sello de los Enviados fue destinado a nacer y enseñar en el mundo, después de los anteriores, precisamente por los problemas que se habían introducido en algunos de los textos y algunas de las doctrinas de los caminos que dejaron los Enviados anteriores por culpa de omisiones, fallas o desperfectos de quienes los siguieron en los siglos posteriores a ellos.
- Monoteísmo: En cuanto al monoteísmo, hay un muy serio problema con la Trinidad y la Encarnación divina. Ni los enseñó el Jesús histórico, ni siquiera el Jesús de los Evangelios, sino que fue una doctrina posterior ingresada en los cristianos. Tampoco fue enseñada por los Profetas de Israel. Es un monoteísmo casi tri-teísta, se diría, un monoteísmo por un lado que habla de 3 verdaderas personas divinas distintas entre sí. Eso no es propiamente monoteísmo.
Frente a ello, el Judaísmo y el Islam se mantienen claramente monoteístas.
Pero el Islam sí tiene las doctrinas y los textos conservados desde su origen, con vocación universal.
El Islam no se niega a reconocer las luces anteriores, pero las otras religiones se han quedado aferradas a sus épocas previas, sin reconocer el Auxilio Divino renovado que vino tras ellos, para bienes de todos, confirmando lo recto que venía de antes, corrigiendo errores que se mezclaron con las enseñanzas venidas de los profetas anteriores, y abriendo nuevas formas más adaptadas a los nuevos tiempos por venir en adelante.
El Islam es una religión que por su potencia vital ha alumbrado varias civilizaciones distintas en 14 siglos. Ampara la multiculturalidad y diversidad humanas bajo el marco común de los grandes preceptos del sendero profético y divino.
Y mantiene viva hasta hoy una extraordinaria historia de espiritualidad sublime, grandes maestros espirituales que ransitan el Camino del Sello de los Enviados, la paz sea sobre él, descubriendo qué es vivir en armonía e inmersos en el contacto con el Único, el Uno, de quien venimos, y a quien volvemos.
Que Dios nos auxilie en nuestro caminar y perdone nuestras faltas.
Que nos alumbre con Su Amor y nos lleve a Su Presencia.